12 de enero de 2023 // Inversión & Mercados
Podemos invertir en valores, en fondos e incluso en sectores o países. Pero también se puede ganar dinero aprovechando y facilitando las grandes tendencias de transformación que cambiarán nuestras sociedades para siempre.
Los mercados se encuentran en medio de fuertes turbulencias e incertidumbres por las amenazas de recesión, la todavía elevadísima inflación en Europa o Estados Unidos y las expectativas sobre los próximos movimientos de los grandes bancos centrales en su lucha contra la crecida de los precios. Y todo ello es lo que ha animado a muchos inversores a pensar más en el largo plazo que en el corto y a priorizar las megatendencias como oportunidad de negocio frente a los continuos vaivenes de los mercados.
Esta actitud tiene sentido, porque, como advertía un informe reciente1 de Deutsche Bank, el año pasado nos dejó un panorama de previsiones rotas, donde ni siquiera se cumplieron la estrecha correlación entre el oro y la inflación o la regla 60/40 de las acciones y bonos de las carteras de inversión.
Además, según previsiones de Deutsche Bank2, la economía global pasaría de crecer un 3,2% en 2022 a un 2,8% en 2023. Así las cosas, el PIB de la eurozona bordearía la recesión anual con un avance de tan solo un 0,3% mientras tres de sus mayores mercados o entrarían en ella (Italia) o se aproximarían peligrosamente (Francia y Alemana).
Al mismo tiempo que eso sucede, todo parece indicar que seguirá alargándose la guerra de Ucrania y se esperan nuevas subidas de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal y el Banco Central Europeo. Desde luego, nadie prevé un galope de las condiciones de financiación tan formidable como el del año pasado, pero eso no significa que su ascenso no vaya a impactar y a crear turbulencias en los mercados.
Por otra parte, según las últimas previsiones de la OCDE, sus miembros se enfrentarán, muy probablemente, a una inflación superior al 6% en 2023 y al 5% en 2024, unas tasas muy elevadas que, es verdad, no reflejan la fortísima rebaja en la escalada de los precios en Estados Unidos y la eurozona. Tengamos en cuenta que, este año, el ritmo vertiginoso de la inflación podría reducirse en un 40% en Estados Unidos y, en los próximos dos años, podría desplomarse a la mitad en la eurozona.
Por todo ello, las grandes tendencias de transformación de nuestra sociedad a largo plazo parecen una apuesta de inversión más estable y, para muchos, también más atractiva. ¿Pero a qué segmentos se dirigen principalmente los que apuestan por las megatendencias? Principalmente caben destacar tres grandes partidas:
De todos modos, como advierte el informe CIO Insights3 de Deutsche Bank sobre las tendencias de inversión de este año, existe también la posibilidad de empezar a obtener rentabilidad con las megatendencias en un plazo más corto. Y por eso destaca las posibilidades que encierran, desde ya, las infraestructuras dirigidas a la transición ecológica y resiliencia que están desplegando Europa y Estados Unidos o la lucha contra el cambio climático, la contaminación excesiva y la pérdida de diversidad.
Recordemos que, solo en el último año, Estados Unidos ha lanzado un programa de gasto de 280.000 millones de dólares para reforzar su ciencia y su tecnología (con especial énfasis en el desarrollo de chips) y otro de 430.000 millones de medidas sociales, climáticas y fiscales para paliar los efectos de la inflación. Al mismo tiempo, la Unión Europea sigue canalizando unos 800.000 millones de euros (los fondos Next Generation) a través de préstamos y subsidios para acelerar la transición ecológica y la transformación digital.
Como se ve, las megatendencias parecen una respuesta idónea para esos inversores que necesitan mitigar las incertidumbres y vuelcos de los mercados en un periodo de grandes turbulencias a corto plazo por la guerra de Ucrania, la elevada inflación, el drástico endurecimiento de las condiciones de financiación y la recesión y riesgo de recesión de algunas de las mayorías economías mundiales y también de nuestro entorno en Europa. Por otra parte, apostar por ellas puede convertirse en una manera de obtener una rentabilidad relativamente inmediata al mismo tiempo que se comprometen con la solución a algunos de los desafíos más importantes a los que se enfrentan nuestras sociedades y, por supuesto, el planeta.
1 https://www.dbresearch.com/PROD/RPS_EN-PROD/PROD0000000000525470.xhtml
2 https://www.deutschewealth.com/content/dam/deutschewealth/cio-perspectives/cio-insights-assets/q1-2023/CIO-Insights-Outlook-2023-Resilience-versus-recession.pdf
3 https://www.deutschewealth.com/en/insights/investing-insights/economic-and-market-outlook/cio-annual-outlook-2023.html
La información suministrada en este documento está basada en criterios objetivos e información fiable, pero no constituye oferta, ni solicitud para comprar o vender productos financieros, quedando la opinión expresada en la fecha de emisión del análisis, sujeta a cambios experimentados por los mercados. Deutsche Bank no se responsabiliza de la toma de decisiones que se fundamenten en esta información. Fuentes: Manual De Mercados Financieros. Martín Marín, J.L., y Trujillo Ponce, A., Ed. Thomson, España, 2004 Y elaboración propia.
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