Europa bajo presión: elecciones alemanas y previsiones económicas 2025
Si en el mes de enero el foco económico estuvo en el resultado de las elecciones estadounidenses, el protagonista de febrero ha sido Europa. Las elecciones alemanas, cuyo veredicto parece que va a agilizar la formación de gobierno, el incremento del gasto en defensa o el posible alto el fuego en Ucrania están configurando el crecimiento económico europeo de los próximos meses. En este segundo episodio de la tercera temporada de Referentes de Inversión, recomendamos a los inversores realizar pequeños ajustes en sus carteras. Sin obviar la importancia de seguir una estrategia a largo plazo, toca llevar el punto de mira hacia mercados como los emergentes.
Referentes de Inversión: factores que marcarán el crecimiento europeo en 2025
Como afirman Alejandro Vidal y Rosa Duce en el arranque de este episodio, de manera habitual tendemos a sobreanalizar el contexto económico de Estados Unidos. Y en febrero, quién ha tomado protagonismo son los mercados europeos, que han superado a los estadounidenses. Este impulso ha venido dado por factores como la formación de nuevo gobierno en Alemania o las expectativas de mayor inversión en defensa e infraestructuras, por parte de los países de la Unión.
Por otro lado, la actualidad de los últimos días también ha estado marcada por un posible alto el fuego en Ucrania. Después de una guerra de desgaste, es muy probable que un cese de las hostilidades consiga reducir por fin los precios de la energía, especialmente en los precios del gas.
Entonces, ¿podría desestabilizarse el escenario económico?
Y, sobre todo, también puede beneficiar al conjunto de la economía europea, que, con el impulso de las medidas propuestas en Alemania, vuelve a mostrarse unida y con voluntad firme para solucionar problemas estructurales históricos como la baja productividad, los niveles altos de deuda o el envejecimiento de su población.
De momento, lo que hemos visto en 2024 es una economía europea bastante debilitada y con mucha disparidad entre países. De ahí que se espere que el BCE siga rebajando los tipos de interés durante este año. Pese a la debilidad de la economía alemana, la economía española ha cerrado el año 2024 con un crecimiento del 3,2%, por encima de lo esperado, y, aunque todo apunta a que no alcanzaremos el mismo crecimiento en 2025, se estima que este no baje del 2%, un entorno económico muy favorable para nuestros activos.
Como inversores, lo que nos toca determinar es cómo puede impactar esta situación en nuestras carteras y qué ajustes deben hacerse para acoplarnos al contexto actual.
Mejoras en los beneficios de las empresas europeas
Que la economía europea pueda empezar a despegar favorecerá un aumento de los beneficios de sus empresas. A su vez, otra buena noticia es que este impulso también está mejorando la actividad en China, un país al que exportan muchas de las compañías europeas.
Lo que se espera en líneas generales es que el crecimiento en Europa mejore lentamente pero que se mantenga de forma sostenida. Además, el BCE va a continuar bajando los tipos de interés lo que beneficia tanto a las empresas como a las familias, que se benefician de una financiación más asequible.
Las claves la agenda económica de marzo: aranceles y bancos centrales
Aunque hasta el próximo 2 de abril no sabremos a ciencia cierta qué pasará con los aranceles y qué impacto tendrán en la economía mundial y la política comercial, marzo va a ser un mes muy movido para los mercados. Para Europa, la máxima a seguir es lograr una respuesta coordinada ante los aranceles, que vele por mejorar su competitividad y productividad.
Otro asunto que se llevará gran parte de la atención mediática en marzo son las reuniones de los bancos centrales, en las que se esperan decisiones claves para la economía. En la del BCE, se espera una bajada de tipos, aunque con una mirada puesta en los posibles efectos inflacionistas de los aranceles estadounidenses.
La de la Fed, que se celebra el 19 de marzo, será una reunión clave en la que, al contrario que en Europa, no se espera una bajada de tipos, aunque sí conoceremos el famoso diagrama de puntos, el baremo que marca hasta dónde pueden llegar a bajar los tipos de interés en un año. La última vez se marcó en 50 puntos y en caso de repetirse, sería algo muy bien recibido por los mercados. De momento, y a la espera de conocer el detalle de los aranceles propuestos por EEUU el próximo 1 de abril, lo cierto es que la Reserva Federal tiene actualmente poca visibilidad sobre los posibles efectos inflacionistas de la futura política comercial americana.
Y es que, aunque se acaben de poner sobre la mesa los aranceles del 25% sobre las importaciones desde México y Canadá y otro 10% adicional sobre China, no podemos dar nada por sentado. Marzo va a ser un mes de mucha negociación y conversación sobre aranceles y de observar cómo avanza la situación entre Rusia y Ucrania.